Cómo se hace el jabón. Parte 5. Elaboración

lunes, 7 de junio de 2010

Bueno chicos pues después de las explicaciones básicas anteriores, hoy !por fin! vamos a explicaros cómo hacer jabón con un procedimiento básico que nos va a servir para todas las recetas. Los que quieran animarse, que lean las entradas anteriores antes de probar. Nadie debe ponerse nervioso, si sigue las medidas de seguridad que hemos contado en entradas anteriores, no tiene porqué pasar nada.
Éste método es el de elaboración del jabón en frío, es decir, no utilizaremos ninguna fuente externa para dar calor a la masa.
La receta que vamos a utilizar es muy básica, pero para empezar está muy bien, después probaremos con más aceites:

-Aceite de oliva 600 gr.
-Aceite de coco 100 gr.
-Sosa cáustica 91 gr.
-Agua destilada congelada 235 gr.

En primer lugar nos ponemos los guantes, las gafas y la mascarilla.
En un recipiente de cristal, pírex, plástico..., echamos el agua congelada. Vertemos después poco a poco la sosa y removemos hasta que ésta se disuelva bien en el agua.
El aceite de coco (o las mantecas duras) lo podemos derretir en el microondas o en un recipiente de acero inoxidable, a fuego lento, y después mezclar con los aceites en estado líquido, en éste caso, el de oliva, así se enfriará la mezcla.
Cuando la sosa esté bien disuelta (solución cáustica o lejía), la añadimos a los aceites. En éste momento introducimos la batidora, para que todo se mezcle bien y empiece a espesar, es decir hasta que llegamos a la traza. ¿Cómo distinguimos si hemos llegado a la traza?. Con algunos aceites tardas más en alcanzarla, como el de oliva. Haz gotear un poco de la mezcla con una cuchara y si deja dibujada una línea en la superficie de la masa, tendrás una traza ligera. Otras veces llegas a ella rápidamente y el aspecto será como el de unas natillas más o menos espesa.
Una vez alcanzada la traza es el momento de añadir los colorantes y después las esencias, y los aditivos, pues el jabón ha empezado a saponificar y es menos cáustico, preservará mejor las cualidades de éstos últimos . Hay que tener en cuenta, que algunas esencias hacen que el jabón se espese muy rápidamente, es otra de las razones para añadirlos al final.
Una vez que hemos alcanzado la traza y añadido los aditivos (que no es necesario), vertemos la mezcla en un molde. Cubrimos el jabón con una toalla, trapos o mantas y lo dejamos asentar 24 horas, o hasta que endurezca lo suficiente para poder cortarlo. Cuando lo cortes hazlo con guantes, pues todavía el proceso de saponificación no ha terminado, y tu piel puede resentirse.
Cuando tengas el jabón cortado en pastillas, lo pondremos a secar en un sitio bien ventilado y oscuro durante cuatro semanas, después estará listo para su uso.

Bueno pues ya está, ya veis lo fácil que es y además muy entretenido. Con ésto te aseguras tener tu propia pastilla de jabón casero, será buenísimo para la piel y podrás personalizar tus jabones de uso cosmético en función de tu piel. Espero que os animéis a probarlo..., buena semana a todos.